Hay que hacer hincapié en cómo Dios te ama, con toda su dulzura, con toda su fuerza, con todo su silencio y con todo su barullo, en fin con todo su Amor.
El Señor quiere que seas feliz y te pone todos los medios para que lo seas, ahora ¿abres tu, tú corazón a Dios?
Señor Jesús, ayúdame a amarte más, a darte mi corazón sin medida, para conocer eso especial, que tienes preparado para mí. Mamita Virgen, abre todas las puertas de mi corazón a Tú Hijo. Gracias!!
ADRIÁN PRUNOTTO
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