¡Señor, hoy estoy feliz! Porque voy caminando por el mundo con Jesús y María de la mano, nada me puede hacer daño, ni las tentaciones, ni la gente, ni yo mismo, porque Ustedes están conmigo. No me abandonen los necesito en cada prueba de la Vida, para no tener miedo, para sentirme libre, de todo, de todos, especialmente de mí mismo.
Gracias Señor y María por brindarme su apoyo incondicional, los amo. Amén
Adrián Prunotto
No hay comentarios:
Publicar un comentario